Sandro Guzmán Reasumió la Intendencia a partir del martes 9 de Diciembre.
El legislador nacional, solicitó licencia en la Cámara de diputados de la Nación, para retomar su cargo en el Municipio de Escobar.
Luego de un año de cumplir funciones, en el Congreso de la Nación, el Intendente Sandro Guzmán, vuelve a ocupar su cargo en el municipio.
El Jefe comunal, tuvo a buen resguardo el “Distrito”, con la muy buena gestión llevada adelante, por su hombre de confianza, el primer Concejal y reemplazo natural como Intendente, Walter Blanco, a quién le reconocieron su capacidad de trabajo al frente de la comuna, tanto desde las filas del oficialismo, como desde los espacios de oposición, de la política escobarense.
La reasunción del referente del Frente Renovador de Escobar, al frente del municipio, genera expectativas de reacomodamientos, en todo el arco político escobarense.
Sandro Guzmán, uno de los impulsores del grupo de los 8, espacio inicial del massismo y embrión de lo que fue el armado del Frente Renovador, tiene un distrito ordenado y en crecimiento desde lo institucional, y esto es puro mérito de la administración municipal, que no cuenta con los favores de la Casa Rosada, ni de la Provincia de Buenos Aires, a la hora de la proyección y ejecución de políticas públicas.
El reconocimiento al liderazgo político, del referente de Massa en Escobar, alienta la conformación de un espacio de unidad del massismo en el distrito, por lo menos, esa es la lectura que se hace a partir de las declaraciones y de los “Gestos” de acercamiento de los distintos referentes que adhieren a la candidatura presidencial del tigrense.
En frente, el heterogéneo espacio que conforma el Frente para la Victoria, cuenta con importantes recursos económicos y con programas nacionales y provinciales, que vuelcan a la acción política, intentando de esa forma, convertirse en una opción de gobierno, en el distrito que es la Capital Nacional de la Flor.
El dirigente que ocupa el sillón de “Lambertuchi” , fruto del voto popular, empieza a mover las piezas del tablero político; en un año que viene lleno de definiciones, porque culmina un ciclo de fuerte representación política, y empieza a gestarse otro, donde desde todos los rincones del país, hacen fuerza para que el cambio sea partir de una nueva administración, o a partir del cambio con continuidad, que expresa el Frente para la Victoria.
En este escenario, Escobar no escapa a la lógica de participación y lucha por el poder, pero por lo visto en los últimos meses, la madurez política, parece haber anclado en el distrito, ya que no se ve, a los vendedores de mentiras y difamadores profesionales, haciendo el ruido molesto, que termina enlodando a toda la política.
Está claro que lo que hacían estos personajes, siempre ocultos en el más cobarde de los anonimatos, lo hacían con intenciones de generar mal humor social y desprecio por las instituciones, por eso desde estas páginas, aplaudimos que la participación ciudadana en la cosa pública, haya alejado a estos “farsantes” de la escena. A buena hora, se empieza a entender, que sin proyectos serios y creíbles, no hay mentiras, ni engaños que sirvan para ganarse el apoyo popular.