“Una mujer comunista”

“Una mujer comunista”

Como un rojo comunista,vestida de libros y letras extrañas, su nombre estaba en otra lista. Stalin, con sus ojos miró sus piernas, le coloco mil cadena. El gulac está enfermo de penaslas cadenas jalan los estómagos si caes, disparan los soldados.

Caminé por su torso desnudo,tocaba como loco el violonchelo,Moscú le cantaba a sus cielos, violonchelo,Moscú le cantaba a sus cielos.

Sus ojos brillan cual San Petersburgo.
Eran espadas finas sus ojos vidriosos,
Las cataratas y delfines de su mente, envidió.
Sus ojos eran la entrada al palacio, hecho con mil cubos de hielo y con pedazos o partículas
me congelo.
Su mente era un océano
de peces rojos, había una hoz y un martillo en sus ojos.
Me hablaba, las letras salían
desordenadas a mi cerebro,
su idioma era extraño
no era ruso ni ucraniano,
Sus escritos eran cartas del espacio
redacción de un marciano.

Lucio