La Crueldad Avanza: Gianfrancesco y el jefe de PAMI Escobar justificaron la demora en la entrega de medicamentos en un caso de una jubilada fallecida

Estudiantes, docentes y directivos del tradicional colegio YMCA de Matheu fueron testigos de otra muestra de crueldad de los candidatos y funcionarios libertarios que recorren el partido de Escobar predicando aplicar la motosierra de Javier Milei contra los jubilados y las políticas sanitarias que impulsa el municipio.
Con total frialdad y sin un ápice de humanidad, el director de PAMI Escobar, Matías Ruppel, justificó las constantes demoras en la entrega de medicamentos cuando una joven detalló el caso de una familiar fallecida. “No se puede echar la culpa al retraso en el remedio. Quizá le hubiera pasado lo mismo si tenía la medicación. Estamos hablando del caso de una mujer mayor, ya de por sí su edad era un riesgo”, explicó, no sin ciertos titubeos, el técnico en energías que asumió la responsabilidad de brindar atención a los afiliados de PAMI en el distrito.
Gianfrancesco aprovechó el encuentro para criticar la gestión municipal. Con rostro de piedra, exigió más inversión en obra pública para asfaltar calles sin asumir las obras paralizadas por el Gobierno Nacional. Pidió más fondos para seguridad al mismo tiempo que la ministra Patricia Bullrich ordenaba el retiro de una base con 75 efectivos de Prefectura Naval Argentina que patrullaban el municipio. En un derroche de descaro, olvidó las políticas de Javier Milei que desfinancian al Hospital Garrahan y no controlan medicamentos con fentanilo que ya mataron a 96 compatriotas, y reclamó más y mejor atención médica en UDPs y hospitales municipales. Mientras él pedía especialistas en salud y políticas sanitarias, el técnico en energías con experiencia en logística, transporte y distribución de un PAMI que no entrega a tiempo un medicamento o una prótesis, asentía.
En sus redes sociales, el candidato a concejal sintetizó así el evento: “Escuchar a los jóvenes es clave. Queremos que tengan pensamiento crítico, no adoctrinamiento”. Viva la libertad, entonces.