En el Hogar San Ignacio, “no todo está perdido”
Hace 15 años funciona el Hogar San Ignacio, una comunidad terapéutica abierta, que busca ser una estructura de sanación para jóvenes con problemas de abuso de drogas. Creado por el Obispado de San Isidro bajo el Equipo Diocesano de Droga Dependencia (EDIDRO).
En 2012 el Obispado lo transfiere a un grupo de laicos interesados y con un equipo interdisciplinario para tratar la problemática, en ese contexto surge la Asociación civil Hogar San Ignacio ubicado en Rincón de Milberg, Partido de Tigre.
El hogar cuenta con sistema de internación, con una capacidad máxima de 12 personas con problemas de adicción a las drogas y alcohol, allí residen hombres mayores de 21 años de zona norte. “No les cerramos las puertas a nadie, siempre y cuando haya vacantes, y si hay el que tiene prioridad es que está dentro del área del Obispado” sostiene Marcos Miguens,Vicepresidente de la Asociación Civil.
Las actividades que realizan los pacientes son variadas, talleres de arte, de desarrollo personal, catequesis, además del cuidado de la huerta, realizan deportes, ajedrez y yoga.
El tratamiento de rehabilitación tiene una duración aproximada de año y medio aunque “está ligado a la evolución de cada paciente”. Cuentan las 24 hs del día con operadores terapéuticos que acompañan cada uno de los adictos en su tratamiento para calmar la ansiedad que suelen tener los internos debido a la abstinencia de las sustancias toxicas.
El equipo terapéutico pone particular énfasis en el post tratamiento “hemos alargado la última etapa donde salen de manera transitoria y gradual a trabajar y regresan al Hogar para evitar recaídas” indica Miguens, así la institución ayuda a los pacientes en su recuperación y a alejarse del entorno que pudiera perjudicar su rehabilitación.
“No es fácil la reinserción social y laboral, existen prejuicios en torno al adicto recuperado” y remarca: “puedo asegurar que una persona rehabilitada tiene una cualidad adicional porque hacen un trabajo de introspección muy importante y llevan muchas herramientas para fortalecerse cuando salen al mundo, tienen una serie de valores adicionales”.
El Hogar San Ignacio junto con la Fundación Oficios trabaja en un programa específico para adictos en etapa de recuperación para ayudar a la reinserción laboral a través de procesos educativos y formativos.
La institución es católica, pero abre sus puertas a personas de bajos recursos que requieran de rehabilitación sin importar su credo ni su condición económica, “el Obispo de San Isidro, Monseñor Oscar Ojea nos encomendó esa misión: que no sea impedimento la recuperación de una persona por cuestiones económicas ni religiosas” enfatiza el especialista.
La Asociación Civil no cuenta con ayuda oficial para mantener el costo de una persona internada que ronda los nueve mil pesos por mes, aunque el municipio en algunas ocasiones ayuda a conseguir medicamentos. Los aportes provienen de los familiares, comercios del barrio y vecinos comprometidos, además recaudan fondos a través de los eventos que realizan.
Se puede colaborar con la organización a través de depósitos o transferencias bancarias y donaciones de alimentos. El sitio web wwww.hogarsanignacio.org.ar y el teléfono de contacto el 011 4512-4372.
Miguel Miguens en nombre del Hogar San Ignacio invita a la comunidad a visitar sus instalaciones en José C. Paz 1342, Rincón de Milberg, “para que sepan que no está todo perdido” concluye.
Por Alejandra Prieto
