“Yasuo Inomata: 88 años de arte, flores y gratitud”
En la jornada de ayer, visitó los estudios de Alternativa Play, ubicados en el corazón del Predio de la Fiesta Nacional de la Flor, el maestro Yasuo Inomata, genio creativo del paisajismo que desde hace décadas da vida a la exposición de floricultura más importante de Sudamérica.
A sus jóvenes 88 años, Inomata continúa dirigiendo, enseñando y transformando cada rincón del predio en un espacio único para disfrutar.
Entre sus obras más destacadas se cuentan la creación del Jardín Japonés de Palermo y el Jardín Japonés de Escobar, verdaderos legados de armonía y belleza que perduran como testimonio de su arte y sensibilidad.

“El intendente Sujarchuk me pidió que diseñara la entrada al distrito”, contó durante la entrevista. Ese paseo, por decisión municipal, lleva hoy su nombre: ‘Paseo Inomata’.

Con humildad y emoción, el paisajista recordó los inicios de su trayectoria:“Lo que hago, lo hago con pasión y corazón”, expresó, evocando el mismo espíritu con el que junto a la comunidad japonesa donaron la creación del Jardín Japonés de Palermo, en agradecimiento al pueblo argentino por recibir a su inmigración.
Durante la charla, Inomata también habló de la época dorada de la Fiesta Nacional de la Flor y expresó su deseo de que se realicen las inversiones necesarias en infraestructura:“Para tener lo mejor para los próximos 60 años”, afirmó.

Su visión de futuro, incluso a los 88 años, lo convierte en un ejemplo de creatividad, perseverancia y amor por la naturaleza.
Llegado a la Argentina en 1966, Inomata fue el artífice no solo de los jardines de Escobar y Palermo, sino también de diversos espacios dentro de la Fiesta de la Flor e incluso de una finca diseñada para el actor Tommy Lee Jones.
Su vida y obra quedaron retratadas en el documental El amo del jardín, dirigido por Fernando Krapp, proyectado en el reciente BAFICI y estrenado oficialmente en el Museo Malba.

“Me egresé en la Universidad de Agricultura de Tokio”, recordó Inomata, dejando entrever la raíz profunda de su arte: el diseño de paisajes como una forma de diálogo entre el hombre y la naturaleza.
En el documental, se lo ve inclinado sobre un tablero, trazando planos o rastrillando un jardín seco con precisión poética. Esa imagen resume su esencia: un hombre que hizo de las flores, el paisaje y la belleza, el centro de su vida.


