El Concejo Deliberante de Escobar aprobó un programa de seguridad alimentaria impulsado por el intendente Ariel Sujarchuk

El Concejo Deliberante de Escobar aprobó un programa  de seguridad alimentaria impulsado por el intendente Ariel Sujarchuk

Se trata de Hambre Cero, cuyo objetivo es erradicar la desnutrición entre la población vulnerable del distrito. “Con esta iniciativa estamos afianzando un Escobar donde  todos juntos trabajamos por la inclusión de los que menos tienen”, remarcó el intendente.

El intendente Ariel Sujarchuk destacó que el Concejo Deliberante de la Municipalidad de Escobar haya aprobado el proyecto de ordenanza enviado por el Ejecutivo. Se trata de Hambre Cero, una iniciativa que se propone garantizar hacia 2019 la seguridad alimentaria de la población en situación de vulnerabilidad social.

“Con esta iniciativa estamos afianzando un Escobar donde privados y públicos, todos juntos, trabajamos por la inclusión de los que menos tienen, de los que más necesitan del Estado y del compromiso del prójimo”, remarcó el intendente.Hambre Cero es un programa donde la Municipalidad de Escobar, en cooperación con las organizaciones de la sociedad civil, busca garantizar de manera integral la seguridad alimentaria y las condiciones de salud, higiene y desarrollo de la población en situación de vulnerabilidad social para erradicar la desnutrición y el hambre de nuestro distrito, a la vez que desplegar políticas articuladas de contención social que posibiliten la inclusión efectiva de las personas y la consecuente superación de las condiciones de pobreza.

En el partido de Escobar, Hambre Cero se articulará con los programas nacionales y provinciales de soporte alimentario, así como promoverá la creación de un banco de alimentos y fomentará el voluntariado social entre las entidades de bien público y los particulares para comprometer a toda la comunidad del distrito en la lucha contra la desnutrición y la pobreza.

De esta manera, en los próximos dos años, la gestión Sujarchuk se propone erradicar el hambre y asegurar el acceso de todas las personas en situación de vulnerabilidad social a una alimentación sana y nutritiva. Al mismo tiempo, busca poner fin a todas las formas de malnutrición de los niños y niñas menores de cinco años y abordar las necesidades nutricionales de adolescentes, mujeres embarazadas, lactantes y adultos mayores. “No se combate el hambre y la pobreza con trucos de magia sino con el fomento de los valores solidarios, la participación ciudadana, el interés comunitario, en la integración y el respeto por el otro. Si afianzamos esos valores, ninguna meta nos será imposible de alcanzar”, concluyó Sujarchuk.